“He decidido que vamos a matar a todos los Swift un día, porque no puedo soportar el virus de mierda que propagó tu hija", dijo Frank Andrew Hoover en uno de los correos que envió a Scott Swift, padre de la cantante.
Hoover envió este y otros mensajes entre mayo de 2015 y octubre de 2016, un mes antes de ser detenido en Texas por violar una orden de alejamiento que le impedía acercarse a Taylor Swift.