El también hijo de 21 años de la modelo y actriz canadiense Pamela Anderson, de 50, habló sobre el incidente que protagonizó la noche del lunes y en el que terminó propinándole un puñetazo en la boca a su famoso progenitor, de 55.
“Estoy devastado por los eventos de los últimos días que han sido resultado del alcoholismo de mi padre", señaló en un comunicado de prensa que envió al medio su representante, Teal Cannady.