En un ensayo titulado "Take The Pledge: No More Indulging Porn", publicado por The Wall Street Journal, la actriz, junto con el rabino Shmuley Boteach, criticó duramente la industria del entretenimiento para adultos y se refirió a los peligros que ésta trae. "Entiendan, el porno es para perdedores.
Es una aburrida e inútil salida para la gente que es demasiado perezosa como para aprovechar los amplios beneficios de salud sexual", aseguró Anderson.