Cinco años atrás, Don Vicente ya había sufrido de otro tumor en el hígado, el cual le fue extirpado en un hospital de Houston.
“Chente no le teme a la muerte, pero quiere disfrutar más a su familia, aunque hay algunos que le sacan canas verdes”, dijo la fuente.
Hasta el momento, ningún miembro de la familia Fernández se ha manifestado al respecto de esta triste noticia.