A Victoria Beckham la conocíamos sobre todo por dos cosas: ser la esposa de David Beckham y, quienes fueron adolescentes en los años 90, por ser Posh Spice, la elegante integrante de las Spice Girls. Era conocida por su belleza y misterio, por su participación vocal estaba siempre detrás de las voces de Melanie Brown (Scary), Melanie Chisholm (Sporty) y Geri Halliwell (Ginger), incluso de Emma Button (Baby).

Por eso, quizá, nunca tuvo pudor para reconocer que no era la vocalista más talentosa. Pero ahora ha dado una revelación poco decorosa para un intérprete: admitió que productores apagaban su micrófono en las presentaciones en vivo del grupo femenino. El objetivo: que se oyeran más las voces de las demás integrantes.

 Han pasado 15 años desde que Victoria Beckham, ahora de 42 años, ya no está con las Spice Girls (a excepción de las reuniones en 2008 y 2012), y su fama ha ido más allá de esa grupo musical, pues tiene una exitosa carrera como diseñadora.

Quizá por eso no le tiembla la voz ahora al decir: «Me reí de último: ahora mi micrófono está encendido, finalmente».

La celebridad dio esas declaraciones durante el evento Vogue 100 en la National Portrait Gallery para conmemorar el siglo de la revista.

Beckham, ahora completamente enfocada en el mundo de la moda, dijo que en esa época le daban vestidos de Gucci porque ese era su sello. Hoy tiene una marca y una empresa próspera y ya no tiene que cantar, ni pretender que canta.

Por eso es poco probable que esté en el posible reencuentro de las Spice Girls en 2016.