A inicios de los 70 se denominó el «Efecto Lucifer» en las personas, este surgió de un experimento en el que se dedujo que incluso individuos que no tienen ningún tipo de trastorno llegan a cometer actos malvados y crueles. David Sucre, Psicólogo Clínico, nos acompañó en Mundo Express para tratar el tema.

El psicólogo asegura que este efecto se puede relacionar con el poder, la complacencia hacia líderes cercanos o la presencia de un ambiente hostil.

Por naturaleza el ser humano es corruptible y fácil de manipular sus valores. La gente tiende a disociar y crear una realidad propia. Sin embargo esto se puede sublimar con actividades que nos despejen la mente.

La familia, la sociedad, la educación y las normas nos ayudan a canalizar los impulsos destructivos y agresivos natos del ser humano, según David.

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