Algunos consejos para proteger a los niños de riesgos innecesarios:

– Bloquear funciones: quien no quiera que un niño navegue por Internet con el iPhone puede bloquear el programa Safari en «Ajustes/General/Restricciones». En el mismo menú se pueden desactivar la cámara, la instalación de aplicaciones o las compras a través de las apps. En los celulares Android las compras se pueden bloquear en Play Store «Ajustes/Controles parentales» o «Ajustes/Pedir autentificación». También en los Ajustes del aparato general.

– Crear conciencia: Lo mejor es configurar el teléfono nuevo junto con los hijos, lo que permite hablar con ellos sobre los puntos principales. Los menores tienen que saber cuándo es mejor tener apagados el GPS, el WiFi o el bluetooth. También es bueno que un niño sepa cómo es una clave segura.

– Controlar los gastos: «Si los padres dan al hijo un aparato con una tarjeta prepaga para llamadas y SMS, los niños aprenden a usar el teléfono para lo que realmente les interesa y reflexionan al respecto», señala la experta Kristin Langer. Se pueden prevenir las compras online no deseadas desactivado los mensajes emergentes y hablando con los hijos sobre la publicidad online.

– Ser tacaño con las informaciones: Los niños tienen que saber qué pueden decir en la red y qué no. «Está prohibido dar nombre y apellido junto con la dirección, así como dar los números de teléfono o los contactos del celular», señala Langer. Y de la misma forma en que se enseña a los niños a tener cuidado con las fotos que cuelguen en la red, también los padres deberían ser precavidos.

– Limitar apps: quien quiera evitar que los menores activen ciertas aplicaciones puede instalar programas que limitan los contenidos como Kids Place. «Se trata de aplicaciones que colocan por encima de lo que se ve una especie de máscara que sólo muestra aquellas apps aprobadas previamente por los padres», explica la especialista Susanne Onnen.

– Navegar seguros: Las aplicaciones de protección de los menores para la navegación por smartphone controlan el acceso a Internet de modo de que sólo se pueden abrir las páginas consideradas aptas para menores. En las pruebas hechas por los expertos casi todas las apps de control que se ofrecen en la tienda online de Android funcionaron bien.