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Amarte a ti mismo, una vía espiritual


Amarnos a nosotros mismos tal vez sea la tarea más importante que tenemos cada día en toda la vida. Es un aprendizaje para siempre. Es el inicio de todo, de donde surge la más maravillosa forma de vivir. Si logramos amarnos, podemos amar a otro de una forma sana y adecuada, si nos amamos podemos vivir bien, si nos amamos a nosotros mismos podemos ser felices en cualquier momento y en cualquier situación. Estaremos más fácilmente conectados a la abundancia y protección infinita que nos proporciona el universo.

Entonces, ¿cómo logramos amarnos a nosotros mismos? ¿Cómo? si siempre nos dijeron que amemos a otros y no a nosotros ¿Por qué empezar por mí? Todas estas son las interrogantes que siempre nos hacemos la primera, segunda y hasta tercera vez que escuchamos esta revelación. Y todos los Maestros de todos los tiempos coinciden en los mismo, amate a ti mismo, ese es el primer paso.

Para amarnos tenemos que empezar a aprobarnos y aceptarnos tal como somos. Tarea ardua ya que siempre estamos comparándonos con los demás tanto en nuestro cuerpo físico como nuestras vidas. Así que un buen inicio para empezar a amarnos es dejar de compararnos, dejar de criticarnos y dejar de juzgarnos.
La gran maestra Louise Hay, de la cual me certifiqué para dar sus talleres, dice que si logramos hacer esto cada día, vamos a lograr amarnos totalmente.

Así que empieza ya. Mírate al espejo y reconoce el bello ser que eres. En el planeta no existe ningún humano, ningún animal, ninguna planta, ni mineral que sea uno igual a otro, no es posible, todos fueron creados diferentes y ahí radica la magia de cada uno. Aunque tengamos las mismas necesidades internas somos muy diferentes afuera, con dones únicos y maravillosos y cada uno con un estilo diferente. Aprende a amar eso de ti. Y cada vez que te veas a un espejo revisa si lo primero que haces es ver algo feo de ti o buscar manchas, arrugas, granos, canas.

Mejor enfócate en lo bello que eres, mírate profundamente a los ojos y dile a ese ser que ves cuánto lo amas, aunque al inicio no te lo parezca. Entre más lo hagas, y más lo digas más fácil te resultará este hábito hermoso. Tu luz saldrá con mas facilidad. Y por favor recuerda no compararte con nadie. Eres un ser hermoso tal y como eres en este preciso momento. Ámate y el mundo te lo agradecerá. Amarás a los demás de verdad . Recuerda que todo siempre empieza en uno mismo. No podemos dar a los otros algo que no tenemos.

¡Namaste!
Claudia Echeverri
Instructora de talleres de transformación y crecimiento
Certificación internacional Heal Your Life Teacher, filosofía de Louise Hay



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