En el texto se detalla: ''La decisión judicial ratificó que el Protocolo -que regula las visitas, comunicaciones y atención médica al señor Julian Assange - guarda armonía con los derechos humanos, se ajusta plenamente al derecho de asilo y a la ley nacional, y emana de la facultad soberana del Estado ecuatoriano de otorgar o retirar el asilo''.
También se indica que en el Protocolo se restablece el acceso de Julian Assange a las comunicaciones. ''Pero se le advierte que, en su condición de asilado y de acuerdo con los tratados internacionales que rigen la materia, no podrá hacer ningún tipo de declaraciones, difusiones o pronunciamientos que interfieran con otros Estados o que puedan afectar los intereses de Ecuador''.
El comunicado finaliza dejando en claro que: ''La Cancillería ecuatoriana hará cumplir esas normas en defensa del interés nacional y conforme al debido proceso. En ese mismo sentido, Ecuador demandará del asilado el respeto a la soberanía y al buen nombre del país''.
Julian Assange, quien fue nacionalizado ecuatoriano en diciembre pasado, se refugia en la embajada ecuatoriana desde 2012, cuando era requerido por las autoridades suecas debido a las acusaciones de dos mujeres por presunta violación, que él negaba, una causa ya archivada.
Fuente: El Telégrafo - nota original: LINK