En Vamos Mundo Magazine aprendimos con la Dra. Pamela Vásquez sobre rutinas de belleza antes de dormir. Te compartimos más detalles en el artículo de la experta.

Los efectos de perder algunas horas de sueño rápidamente se van a notan en nuestra piel, dormir permite que nuestra piel, cuerpo y mente se reinicien, y cuando no tenemos el suficiente descanso, nuestra complexión se ve sin vida, la energía decae y el estrés puede volverse inmanejable. Una de las vías más efectivas para fomentar una noche placentera de sueño es con una rutina para dormir.

Algunos tips incluyen la rutina del cuidado de la piel ya sea facial y corporal, suplementos naturales de colágeno que ayuden a la piel y al sueño, los resultados valen la pena con una piel luminosa, paz y mente calmada.

Tomar un baño realmente relajante: el agua caliente calma la tensión en los músculos, la sensación de inmersión en el agua es un calmante natural, las sales de baño son una buena opción, así como los aceites esenciales y la lavanda y valeriana son los más idóneos y preparatorios para el sueño.

Una de las razones de falta de sueño que impacta negativamente en nuestra piel es la disminución del colágeno, siendo la proteína principal que da estructura a la piel, con el tiempo disminuye causando flacidez, la formación de líneas de expresión y adelgazamiento de la piel.

Los suplementos naturales de colágeno y magnesio, un mineral asociado a mejorar la calidad de sueño, función nerviosa y mantenimiento de los músculos; será una buena opción de tomarlos después de tomar el baño, y con vaso de agua temperatura ambiente no fría, se absorberán mejor.

El mantenimiento de la piel, la firmeza, brillo, y que se vea saludable; se da gracias a una buena y profunda hidratación, las cremas con ceramidas, serums y texturas ligeras serán un gran aliado, así como la limpieza mientras menos se toque la barrera cutánea es mejor, hoy en día ya existe un myst o bruma de hidratación, así como agua micelar en espuma que hará más fácil y placentera la forma de limpieza e hidratación y mejorar esas líneas de expresión.

Todos los tipos de piel se benefician de la exfoliación y una vez a la semana antes de dormir es el mejor momento de realizarlo, a más de los “scrubs” tradicionales, el ácido glicólico en bajas concentraciones, es la mejor opción para hacerlo, dando luego brillo y regenerando la piel mientras se duerme.

Una vez en la cama el tocar nuestros pies y suavizarlos con algún aceite o loción en crema puede ser una forma de auto-cuidado, aceites con manzanilla, lavanda o cremas con manteca de karité, pueden ayudar mucho, el movimiento de masaje debe ser de abajo hacia arriba, desde la base hacia los dedos y en cualquier parte que se sienta tensión, incluyendo los espacios entre los dedos ya que al ser más delgada la piel en esa zona los efectos del aceite se absorberá más fácilmente.

La rutina de belleza antes de acostarse es importante para tener un buen descanso y durante el mismo reparar y regenerar la piel, el cuerpo y la mente.

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