En El Mundo de Cabeza, el coach ontológico Santiago del Salto abordó un tema emocionalmente desafiante pero necesario: el arte de soltar.
En esta conversación, explicó cómo el desapego no implica indiferencia, sino un acto profundo de amor propio, conciencia y libertad interior.
Soltar es un proceso integral que toca todas las dimensiones del ser humano: mental, emocional, física, energética y espiritual. No se trata de desentenderse, sino de dejar partir lo que ya no aporta crecimiento, desde relaciones y creencias hasta trabajos o patrones de vida. Santiago enfatiza que cuando soltamos desde la conciencia, no lo hacemos por resignación, sino por transformación.
Claves para soltar de manera saludable:
1. Identificar el apego:
Reconocer qué personas, situaciones o ideas nos generan dependencia emocional.
2. Comprender el origen del miedo:
Detrás de cada apego suele haber miedo: al cambio, al abandono, a la incertidumbre.
3. Reconectar con el poder interior:
Recuperar nuestra autonomía emocional para no depender de fuentes externas para sentir paz o estabilidad.
4. Aceptar la impermanencia:
Todo cambia; soltar es fluir con la vida, no contra ella.
5. Acompañarse en el proceso:
Contar con guía profesional es clave para desarmar creencias, emociones y heridas que nos impiden avanzar.
Soltar no significa dejar de amar. Significa amar en libertad, reconociendo que no podemos controlar todo.
Ya sea una relación, un trabajo o una etapa vital, dejar partir es también abrir espacio a nuevas experiencias que estén en sintonía con nuestra evolución.