Fotografía ecuatoriana de moda se impone en Europa
Luis Dávila es ecuatoriano de nacimiento, tiene 28 años y hace más de dos años decidió dejar el país para continuar con sus estudios, sin imaginar que la fotografía de moda se convertiría en una de sus más grandes pasiones. Con un ojo y una habilidad para captar las más elegantes imágenes, preguntamos a ‘Lucho’, como lo llaman muchos de sus conocidos, cuándo y cómo empezó esta nueva etapa de su vida. Actualmente vive en España, pero a recorrido varias partes de Europa, dejando su huella ecuatoriana por donde va.
Luis Dávila – Todos los derechos reservados
¿Por qué fotografía de moda?
Mi interés por la fotografía empezó alrededor del año 2005, con un viaje que realicé a China. Descubrí que la luz en verano al norte de este país es muy bonita. A mi regreso, y a pesar de tener otras distracciones de la edad, sabía que quería hacer fotografía. En primer lugar estudié diseño, luego fotografía. Eso me ayudó a tener algo muy importante, criterio y gusto visual, ya que, al decir de Alessia Glaviano, -editora de Fotografía de Vogue Italia y L’Uomo Vogue-, en la moda el gusto es muy importante.
Me gusta la fotografía de moda porque la moda es algo en lo que estamos todos. Es una forma de expresarse y un reflejo cultural y social muy claro de lo que pasa en cada año. Me refiero a que todas las personas forman parte de ‘la moda’, porque todos vivimos moda. El momento en que te levantas por las mañanas y estás frente a tu armario para elegir qué vas a usar, es moda, es seleccionar lo que te representa, es expresar emociones, estados de ánimo a través de la ropa. Cuando compras ropa, sin importar la marca, hacemos una selección de ¡qué nos representa y que no! Eso es moda y por eso me gusta, por que la moda llega a todo el mundo.
Además la moda te permite crear historias a partir de todo, puedes tener escenas totalmente surreales o mensajes muy fuertes y chocantes, todo planteado de forma muy estética. Mira, Steven Meisel, es un gran ejemplo de esto.
Actualmente resides en España, ¿por qué elegiste ese país y qué experiencias tienes en esa tierra que ahora es tu hogar?
Después de haber trabajado en Quito en diseño, publicidad, fotografía y haber acabado un máster en PNL decidí ampliar mis conocimientos así que estudié un máster en estrategia e innovación llamado Strategic Design Labs y otro máster en Fotografía de Moda, estudios que los realicé en Madrid. Luego trabajé con Hunter & Gatti, fotógrafos muy reconocidos a nivel mundial con oficinas en Nueva York y Barcelona. Formé parte, también, de un programa de mentoring con Nick Knight, uno de los 10 mejores fotógrafos del mundo.
Madrid es una ciudad que me ha recibido con los brazos abiertos, es agradable y bonita, inspiradora y rica en cultura e historia. Creo que por eso decidí quedarme. Tiene muy buen ambiente, gastronomía exquisita y puedo moverme por Europa fácilmente. También porque está al lado de África, muy cerca de San Petersburgo y Asia, y a un salto de América. Esto es muy importante en lo que hago actualmente, ya que al tener que estar de un lado al otro para realizar alguna sesión fotográfica, me permite hacerlo con facilidad. Eso es lo que me gusta de Madrid. Para mi trabajo, lo tiene todo.
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Ahora que has aprendido en España, tienes una amplia experiencia y no han faltado las oportunidades, ¿te gustaría regresar a Ecuador y enseñar a otros lo que has aprendido?
Me interesa mucho el mercado Latinoamericano, creo que hay grandes posibilidades a futuro, ya que según he visto se están desarrollando proyectos en moda que tendrán gran alcance, como los de Cristina Maag. Creo que dentro de un poco tiempo viajaré para allá a realizar más trabajos, si es que es posible. A Ecuador, si lo pienso visitar, aunque por temporadas cortas y para trabajos muy puntuales.
Actualmente doy una clase muy corta en un máster de fotografía de moda, me parece muy enriquecedor y divertido pero por temas de trabajo y tiempo, es muy complicado para mí poder involucrarme más en todo el máster. Me encantaría compartir mis conocimientos en Ecuador pero considero que todavía tengo un largo camino por recorrer y mucha experiencia que ganar.